Badostáin, la historia continúa.
Las campanas
En el siglo XX encontramos dos refundiciones de las campanas
1900. Durante este año se inauguraron las nuevas campanas. Sabemos que en la segunda mitad del año se pagaron y durante el cuartro trimestre se recibieron la bendición. Antes de cambiarlas vemos muchos cargos de reparaciones, y esa es sin duda la causa de su sustitución. No obstante veremos que los problemas se mantuvieron , ya que en los siguientes años encontramos numerosas facturas de reparación de estas nuevas. No pasaron 10 años cuando ya se comenzaron a pagar facturas para su reparación y eso fue una constante hasta que, en el año cuarenta y cuatro, serían refundidas para hacer las que conocemos en la actualidad. En el arzobispado se conserva el legajo que dice: “Prior de D. Serapio Gurbindo, Párroco de Badostáin, digo: que dos campanas de su iglesia se hallan rotas e inservibles, y se desea proceder a su fundición entre el pueblo y la iglesia pagando dos partes aquél y una tercera la fábrica y cuya obra importa ochocientas pts”
1944. Este año se cambiaron las campanas. Fueron trasportadas a Pamplona en carros las antiguas y se refundieron e hicieron las nuevas. El alcalde pasa las cuentas de llevarlas y traerlas en carros y la contratación de peones. La maniobra debió ser complicada. Se trataba de transportar los 1240 kilos de bronce que pesaban y según testimonios, el subir la cuesta con semejante carga necesitaba de bueyes de refresco y costaba mucho tiempo.
Al poner las campanas se modificaron los arcos del lado de la fachada del campanario, que en un principio eran más pequeños. (según D. Alfredo)